5 consejos para empezar a practicar actividad física

Cualquier momento es bueno para empezar a tener unos hábitos de vida más saludables como tener una dieta saludable y equilibrada o realizar actividad física. 

Y, ¿por qué es tan importante la práctica de actividad física? La importancia viene dada porque cada vez existen mayores certezas sobre el vínculo presente entre la actividad física y la salud hasta el punto de considerar la propia inactividad como un factor de riesgo para las enfermedades modernas (Devís & Peiró. 1993).

La actividad física posee un doble impacto en la salud, uno directo y otro indirecto, a través de la condición física. Esto quiere decir que la realización de actividad física influye en la salud, exista o no mejora de la condición física, y que esta última repercute en la salud no por sí misma, sino por influencia del aumento de actividad física (Cureton. 1987).

Para entender esto, debemos explicar primero los conceptos de actividad física y condición física. La actividad física se define como cualquier movimiento del cuerpo producido por la contracción de músculos esqueléticos que resulta en un incremento del gasto calórico por encima del basal, este término se diferencia del de ejercicio físico en que éste último es un subtipo del primer término siendo una actividad física planeada, estructurada y repetida realizada durante el tiempo libre. (Bouchard et al. 1990b). La condición física, por otro lado, hace referencia al potencial o la capacidad física que tiene una persona, pero está relacionado también, de forma indirecta, con la salud.

Desde siempre se ha relacionado la condición física con con la búsqueda de mejora física y ha sido entendida y utilizada como forma de preparación para el rendimiento deportivo ya que sigue los principios de entrenamiento (Almond, 1990). Sin embargo, otros autores intentan dar otro sentido al término de condición física distinguiendo entre la relacionada con la habilidad atlética y la relacionada con la salud.

De una forma u otra, la realización de actividad física tiene importancia tanto para la mejora de la condición física general como para estar más saludables y evitar padecer algunas enfermedades. Sin embargo, aún sabiendo las ventajas y beneficios que nos proporciona, muchos de nosotros seguimos teniendo rechazo a vestirnos de chándal y salir a practicar actividad física. También están los que lo han intentado mantener un estilo de vida activo realizando actividad física pero que han terminado dejándolo. Este abandono puede ser debido principalmente a motivos de carácter intrínsecos como la desmotivación o desgana y de carácter extrínseco como la falta de tiempo (Cecchini y González. 2008).

Para evitar que se produzca el abandono de la actividad física y, por tanto, del estilo de vida activo, en este artículo vamos a proporcionar 5 consejos que servirán de mucha utilidad para continuar la práctica deportiva sin llegar a abandonarla:

1. Márcate objetivos a corto, medio y largo plazo reales. Una de las principales causas de la desmotivación durante la práctica de actividad física es no lograr alcanzar con rapidez los objetivos que nos habíamos marcado. Esto ocurre debido a que algunas veces nos marcamos objetivos poco realistas confundiendo el objetivo a largo plazo (el resultado final que queremos ver) con los objetivos a corto plazo (los pequeños avances que iremos obteniendo hasta alcanzar el resultado final). Para hacer una correcta planificación debemos pensar en el resultado final, el objetivo principal que deseamos alcanzar, una vez marcado el objetivo a largo plazo, debemos pensar que este cambio no se va a producir de la noche a la mañana, por tanto, debemos partidos ese objetivos principal en varios subgrupos (objetivos a medio plazo) en los que podremos apreciar nuestro progreso, y, a su vez, estos subgrupos dividirlos en otros subgrupos (objetivos a corto plazo) que serán los pequeños cambios y avances que esperamos lograr progresivamente.
2. Entrena en grupo con amigos. Una manera de reducir el factor pereza y desgana para la realización de actividad física es realizarla en compañía. La práctica deportiva en grupo es un incentivo y sirve para motivarte tanto tu como tu compañero, ya que el entrenamiento se vuelve más ameno evitando que se convierta de una rutina agobiante, además se produce una sensación de responsabilidad y compromiso con la otra persona ya que si faltamos al entrenamiento parecerá que habremos pasado de tu compañero. Para concluir, también debemos destacar el factor competitivo, que siempre nos motivará a seguir mejorando "compitiendo" con tu colega.
3. No te agotes desde el principio. Si, debes exigirte, pero esto se refiere únicamente a la constancia. Uno de los motivos que producen más desgana a la hora de realizar actividad física es el sentir excesivo dolor y fatiga durante la realización de los ejercicios. Tienes que exigirte moverte más y ser más activo, no realizar ejercicios que te produzca dolor o llevar una intensidad de entrenamiento insostenible para tu cuerpo. Cuando la práctica deportiva se haya convertido en un hábito para tí y hayas aprendido a realizar correctamente los ejercicios será el momento de forzarse un poco más en los entrenamiento, pero siempre bajo los limites de tu propio cuerpo para evitar que se produzca lesiones.
4. Realiza una correcta técnica en los ejercicios. La realización de una correcta técnica es un factor muy importante, ya que ejecutar ejercicios de forma errónea puede producir un sobreesfuerzo en alguna zona no deseada, haciendo que ese sobreesfuerzo se traduzca en una lesión que nos obligue a parar nuestro progreso. Lo ideal sería centrarte en aprender la técnica de los ejercicios antes de meterle intensidad a los entrenamiento, y, si tienes alguna duda de como se ejecuta algún ejercicio, no dudar en consultar a alguien.
5. Convierte la práctica deportiva en una prioridad. Antes hemos hablado de que uno de los motivos de abandono de la realización de actividad física eran los de carácter extrínseco, siendo el principal motivo de estos la falta de tiempo. Puedes creer que realmente no tienes tiempo, pero estamos equivocados, perdemos mucho tiempo realizando otras actividades en nuestro tiempo libre como estar con las redes sociales, navegar por internet o jugar a videojuegos. Si quitamos un poco de tiempo a estas otras actividades sedentarias y se lo damos a la actividad física para convertirla en una prioridad, tendremos tiempo suficiente para no tener la falta de tiempo como una excusa para abandonar el estilo de vida activo.

BIBLIOGRAFÍA

Almond, L. (1990). Sports pedagogy: Translating theory to practice. In Humanismo y nuevas tecnologías en la educación física y el deporte: AIESEP Congreso Mundial. Madrid, 26-31 julio de 1988 (pp. 67-72). Instituto Nacional de Educación Física.

Baena, A. C. M., Chillón, P., Martín-Matillas, M., López, I. P., Castillo, R., Zapatera, B., ... & Fernández, M. D. (2012). Motivos de abandono y no práctica de actividad físicodeportiva. Cuadernos de Psicología del deporte, 12(1).

Bouchard, C., et al (1990). Exercise, fitness, and health: the consensus statement. In Exercise, fitness, and health: a consensus of current knowledge: proceedings of the International Conference on Exercise, fitness and health, May 29-June 3, 1988, Toronto, Canada.. (pp. 3-28). Human Kinetics Publishers.

Cecchini, J. y González, C. (2008). Motivos por los que los estudiantes universitarios no practican deporte, Revista Fuentes, 8, 1-10

Cureton, K.J. (1987). Commentary on "Children and fttness: a public healrh perspective". Research Quarteriy jor Exercise and Sport, 58, 315-320.

(Devís Devís, J., & Peiró Velert, C. (1993). La actividad física y la promoción de la salud en niños/as y jóvenes: la escuela y la educación física. Revista de psicología del deporte, 2(2), 0071-86.)